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Aprendiendo a vivir

Y habló la presunta mayoría

Estoy empezándome a cansar de la cantinela de que el gobierno está dictando normas en contra de la mayoria católica del pueblo. Pues señores o esa presunta mayoría decidió votar a un programa nada procatólico como el del PSOE o va a resultar que no es tal mayoría.
Vamos a ver. Si aceptamos que estamos en democracia, el partido más votado tiene el beneplacito explicito del pueblo para legislar todo aquello que prometió en campaña. Todos sabiamos que el PSOE estaba a favor del estado totalmente laico, de un cambio en la enseñanza, del divorcio expres, del aborto, del matrimonio homosexual, etc. En este sentido no ha habido ningún engaño. Y la mayoría del pueblo, les votó. Que esta mayoría fuese o no de religión católica, lo ignoramos y de hecho no es pertinente. ¿A que viene entonces quejarse ahora? Haber votado al PP, digo yo. Porque otro error de los católicos radicales es pensar que el resto de católicos toma todas sus decisiones -en especial el voto- en función de sus creencias. Se les olvida que en esta decisión pesan muchos más factores.
Uno no vota sólo en función de la religión que profesa, en mi opinión, sino que tiene en cuenta muchas más cosas. Supongamos que yo soy hombre, joven, soltero, asalariado, con piso propio, español, con pareja, sin hijos, estudiante, católico. ¿A quien creeis que votaré? Cambiemos un factor: hombre por mujer y pongamos dos hijos ¿Y ahora? Y si en vez de asalariado estoy en el paro y vivo con mis padres ¿Y si en vez de joven soy viejo y con una mujer enferma? En todos los casos, podríamos mantener invariable el hecho de ser católico y sin embargo, el prisma con el que vemos la vida sería totalmente distinto.
Esos que ondean la bandera de la presunta mayoría catolica suelen responder a un perfil más parecido al de Ana Botella que al del resto de los mortales. Quizá por eso no son realmente una mayoria. Porque en la sociedad no predominan los señores empresarios de buena familia, las señoras de collar de perlas y reuniones dominicales y los niños de papá que estudian en la privada y tienen el puesto de trabajo asegurado desde que nacen. El hecho de que sean católicos, en este caso, no es más que un accidente de la Historia de nuestro país.
Otra cosa es que nos quejemos de todo aquello que hace el gobierno y que nadie sospechaba que haría durante las elecciones. Todo aquello que se hace sin anunciar es criticable, y más si defrauda a aquellos millones de personas que depositaron su confianza en él. Nos guste o no nos guste, esa es la mayoría que cuenta: la de los electores.

2 comentarios

misterdj -

Es que el tema de mayorias y minorias es jodido. Esto de intentar tener contenta a tanta gente es muy complicado.

Ote -

Joder, no se para que comento si no tengo nada que objetar.